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08 de mayo de 2012 05:00
Ochocientos gallegos ya han formalizado su testamento vital o declaración de instrucciones previas sobre los cuidados y tratamientos que desean recibir al final de la vida. El número ha crecido de manera exponencial desde el año 2008, cuando apenas se habían firmado 90 documentos en toda Galicia, según subrayó ayer Antonio Fernández-Campa, secretario xeral de Sanidade, durante la presentación en la Fundación Paideia de A Coruña de la Guía de Ética en la Práctica Médica.
Editada por la Fundación de Ciencias de la Salud y la Fundación para la Formación de la Organización Médica Colegial, la publicación, que alcanza ya su quinta edición, pretende clarificar a los profesionales cuestiones y conflictos que se plantean en la práctica médica diaria y «llevar la formación ética a todos los colegiados», según destacó Juan José Rodríguez Sendín, presidente de la Organización Médica Colegial de España.
El doctor y filósofo Diego Gracia, presidente de la Fundación Ciencias de la Salud, subrayó que «este no es un libro teórico, es una guía para tomar decisiones clínicas», y se refirió al déficit de formación bioética en los programas académicos frente a las crecientes necesidades que, a su juicio, se derivan de «un nuevo modelo de relación clínica y de asistencia sanitaria».
Con casos prácticos paradigmáticos, la guía aborda información clave acerca de los documentos que se han ido impulsando sobre la participación del paciente en la toma de decisiones sobre su salud, desde la firma del consentimiento informado hasta el propio testamento vital, las órdenes de no reanimación, el nombramiento de representantes, la donación o incluso indicaciones u órdenes parciales como el denominado testamento de sangre de los testigos de Jehová para no ser transfundidos.
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