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http://www.irishtimes.com/newspaper/ireland/2012/0221/1224312116280.html
Un niño de tres años de edad, puede recibir una transfusión de sangre durante la cirugía si es necesario a pesar de las objeciones de sus padres, que son los testigos de Jehová, el presidente de la Corte Suprema se ha pronunciado.
El niño, que no puede ser nombrado por orden de la corte, tiene que tener las amígdalas debido a infecciones recurrentes y debido a que está retrasando el desarrollo del habla.
El padre del niño dijo a la corte ayer que él y su esposa querían que su hijo a obtener el mejor tratamiento médico, pero no había una creencia fundamental de que la sangre "no debe ser tomado con el cuerpo".
Un consultor de tratar al niño, dijo en una declaración jurada que había un riesgo de muerte y daño cerebral si el hospital no estaba en condiciones de administrar cualquier transfusión.
La corte escuchó que el niño requiere una inserción amigdalectomía, adenoidectomía y la arandela (para hacer frente a una acumulación de líquido en el oído medio) porque, además de las infecciones, también ha sufrido alguna pérdida de audición. La cirugía está programada para mañana, Eileen Barrington SC, para el hospital, dijo.
El juez Nicholas Kearns concedió el hospital un fin de permitir una transfusión que se da si es necesario.
GP El niño había indicado que tenía cuatro episodios de infección en los últimos cuatro meses y los antibióticos necesarios, lo que fue, obviamente, a la angustia de sus padres, dijo el juez.
Estaba satisfecho que el hospital, en la mayor medida de lo posible, se abstengan de dar la transfusión y cualquier transfusión que ocurriría sólo después de una revisión por un consultor senior.
El niño fue remitido al hospital el año pasado y su asesor decidió el mes pasado que requirió cirugía, pero los padres no estaban muy contentos de proceder, la Sra. Barrington, dijo. Dada la historia de la infección y el retraso en el desarrollo del habla del niño, se había decidido llevar a cabo la operación de mañana.
El juez Kearns dijo que apreciaba la forma en que el hospital se acercó a la materia y mostró un gran respeto por la religión de los padres.
También felicitó a los padres por la forma cortés y digna en la que habían puesto sus puntos de vista y no hizo ningún pedido en los costos de la aplicación, lo que significa cada parte paga sus propios.
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